Consumo Mínimo en los restaurantes: ¿Está prohibido por la Profeco?

¿Has tenido la mala experiencia de que te piden que consumas alimentos o bebidas para poder permanecer en un lugar?

¿O que hayas entrado a un restaurante y, cuando te sentaste en tu mesa, el camarero te advirtió que existe un consumo mínimo?

Pues bien, debes saber que esa práctica está prohibida por la ley mexicana.

La Ley Federal de Protección al Consumidor, establece que las personas tienen derecho a escoger los productos y servicios sin presiones o condicionamientos, por lo que aplicar una política de “consumo mínimo” o de “no permitir al cliente entrar si no lleva dinero suficiente” es contraria a la ley.

El consumidor debe ser respetado

Empresas y establecimientos de todo tipo deben ser respetuosos con sus clientes y consumidores, ya que si bien es cierto que es el dueño quien decide quiénes entran a salir a su local, no es correcto condicionar la entrada de una persona sólo por el motivo de que no consumió.

La Ley Federal de Protección al Consumidor en su artículo 58 señala que los proveedores de bienes, productos o servicios no pueden negar ni condicionar al consumidor por razones de género, nacionalidad, étnicas, preferencia sexual, religiosas o cualquiera otra.

Lo que sí es permitido es que existan restricciones para la utilización de ciertos servicios o la adquisición de algunos productos, siempre y cuando sea aplicable a todos los consumidores y no se haga con el propósito de discriminar.

Por ejemplo: un gimnasio puede tener una regla que diga "niños menores de 12 años no pueden ingresar al gimnasio", esto no es discriminatorio porque aplica para todas las personas, o un bar puede tener una regla que diga "no se permite el ingreso de bebidas alcohólicas", aquí tampoco se está discriminando porque esta regla aplica para todos los consumidores.

Pero condicionar el uso de un servicio o el consumo de un producto, además de ser discriminatorio va en contra de los derechos del consumidor.

Recordemos que el derecho a comprar es el que te permite libremente seleccionar los productos y servicios que deseas adquirir.

Además de tener la opción de escoger, también tienes el derecho de no elegir nada. En este sentido, ningún establecimiento puede condicionar tu consumo, pues implica restringirte la elección de productos y servicios en su local al imponerte condiciones abusivas.

¿Qué hacer en estos casos?

Para evitar que tu consumo sea condicionado por el proveedor, existen algunas recomendaciones que debes seguir, entre las que destacan:

· No hay necesidad de comprar más bienes y servicios de los que realmente requieres.

· Comprueba el precio del producto o servicio con anticipación para no ser sorprendido con un precio alto.

· Exige la entrega del comprobante fiscal, ya sea en formato físico o electrónico.

· Lleva contigo los cupones promocionales para hacer válidas las ofertas.

· Lleva contigo la información sobre tus derechos como consumidor ante cualquier situación de abuso, acoso o discriminación.

· Llamar a PROFECO al teléfono del consumidor en línea por el número 8004688722 o a través del perfil de Twitter @AtencionProfeco