¿Por qué ha disminuido el consumo de frijoles en México?

¿Por qué ha disminuido el consumo de frijoles en México?

En las últimas décadas, el consumo de frijol ha disminuido debido a la estigmatización que ha sufrido la imagen de esta leguminosa, al punto de ser considerada como una "dieta de pobres", según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Los especialistas explicaron que esta reducción en el consumo es consecuencia del descrédito que han generado las campañas publicitarias que han asociado al frijol con la pobreza.

¿Comida de pobres?

En la actualidad, los jóvenes no consumen tanto frijol como antes y esto es debido a que consideran que este alimento sólo lo comen quienes tienen pocos recursos, ignorando el verdadero valor real que se concentra en lo que hasta hace poco formaba parte de la mesa de la mayoría de los hogares mexicanos.

Por ejemplo, un kilo de frijoles puede adquirirse con un costo aproximado de 25 pesos, mientras que un kilo de carne de res podría alcanzar hasta 500 pesos.
En promedio, los mexicanos consumen 160 gramos diarios de frijol, cuando la cantidad recomendada por los especialistas en salud es de 200 gramos.

Elvira Sandoval Bosch, coordinadora de la Licenciatura en Ciencia de la Nutrición Humana de la UNAM, explicó que cuando se consume menos de 100 gramos de frijol al día, se corre el riesgo de padecer anemia por deficiencias nutricionales y carencia de proteínas.

El frijol fomenta la economía sustentable

A nivel mundial, las variedades de frijoles rojos y negros son los que se producen a mayor escala, pero en México se pueden encontrar más de 50 variedades.

Cada variedad tiene sus propias características, pero todas se cultivan de forma sostenible.

Mientras que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) afirma que las leguminosas son consideradas uno de los cultivos alimentarios más sostenibles, especialistas mexicanos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han confirmado que éste es también el caso de las producidas en México.

Para el experto en genética y biotecnología vegetal del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (CINVESTAV) de la UNAM, José Luis Villaseñor Durán, para producir leguminosas de manera sustentable es necesario promover su cultivo por parte de los pequeños agricultores o incluso de las propias familias.

Hasta ahora esto se ha hecho a través del sistema de la milpa. Esta práctica es común en la agricultura de subsistencia y consiste en cultivar conjuntamente maíz, frijol y calabaza.

Además de ser productivo, este sistema permite a los agricultores conservar la biodiversidad al utilizar semillas autóctonas que a menudo carecen de patente de modificación genética.

Los frijoles no son los culpables de los altos índices de obesidad en México
En otras palabras, no son los frijoles los responsables del problema de la obesidad en México, ni tampoco "el argumento del maíz", como se ha conocido.

Más bien, el problema está relacionado con los alimentos procesados con alto contenido en grasa y sal.

El estudio recomienda invertir en educación nutricional para que la comida limpia sustituya a la comida basura en los hogares mexicanos.

Es una situación compleja, pero sugiere algunas conclusiones interesantes: si un país produce comida basura y no alternativas saludables, entonces ese país será susceptible de tener dietas dañinas.

También significa que los consumidores que insisten en comer sano deben ser apoyados por los programas educativos de sus gobiernos que fomentan la compra de alimentos saludables.