PROFECO alerta sobre estas marcas de maquillaje que no cumplen con lo que prometen
Un nuevo estudio de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha demostrado que los polvos compactos de cinco marcas contienen entre 17% y 52.7% menos del producto que dicen contener. El estudio también demostró que estos productos han sido probados para su etiquetado y publicidad, pero la Profeco no tiene información sobre sus ingredientes.
Existen varias razones por las que esto puede estar ocurriendo. La primera es que las empresas podrían estar utilizando ingredientes más baratos en sus productos de maquillaje; la segunda es que los fabricantes utilizan más polvo compacto del necesario para lograr un efecto deseado; y por último, es posible que las empresas utilicen materiales de empaque o procesos de producción más baratos.
Salen del mercado por inconsistencias en su contenido
La Procuraduría Federal de Protección al Consumidor (PROFECO) ha tomado medidas contra cinco marcas de polvos compactos, alegando que contienen menos de lo que prometen.
El organismo señaló en un comunicado que estas marcas supuestamente están hechas de arroz y han prometido reducir las líneas de expresión, ocultar el brillo o ser orgánicas.
De hecho, en la edición de noviembre de la Revista del Consumidor, la PROFECO indicó que hay dos marcas más que también podrían ser retiradas del mercado si no demuestran la veracidad de sus afirmaciones.
Mentirle a los consumidores como estrategia de venta
Dada la gran competencia que existe en el mercado actual, algunas marcas de maquillaje no cumplen con todo lo que dictan sus etiquetas, sin embargo se promocionan como artículos casi milagrosos.
De las marcas de maquillaje revisadas por la PROFECO, cinco de ellas quizá no cumplen con lo que prometen:
La marca Zan Zusi, en su etiquetado promete un "efecto hidratante continuo", pero no puede demostrarlo.
Renova Matte también promete "cobertura perfecta", sin embargo debe demostrar en qué consiste dicha propiedad.
IM Natural dice "fórmula que no reseca ni obstruye los poros de la piel", pero debe explicar cómo no obstruye los poros y su etiquetado con cumple con esto.
El producto Cicatricure, de Genoma Lab contiene tres promesas que no se cumplen: "luminosidad instantánea", "disimula las líneas de expresión y unifica el tono de la piel", "difumina las líneas de expresión".
El polvo compacto de marca Bella, su etiquetado dice que ayuda a controlar el exceso de grasa en el rostro, de larga duración “para un aspecto impecable durante más tiempo", sin embargo ante PROFECO no lo demostró.
Mentir a los consumidores es una estrategia que las empresas llevan utilizando desde hace décadas, y es una práctica cada vez más frecuente.
¿Cómo hacen las empresas para que sus clientes se lo crean?
Todo se reduce a unos cuantos elementos clave:
1) Hacer que algo parezca valioso cuando no lo es
2) Conseguir que la gente se centre en lo que quiere en lugar de en lo que necesita
3) Dar a la gente lo que cree que necesita, pero no dárselo realmente
La idea que subyace a las mentiras a los consumidores es bastante simple: si puedes conseguir que la gente compre tu producto o servicio diciéndoles lo que quieren oír, entonces los tienes exactamente donde los quieres.
No es necesario que estén bien informados sobre el producto o servicio que van a comprar, sólo necesitan la información suficiente para convencerse de que están tomando la decisión correcta.
