Chemours, DuPont y Corteva condenadas a pagar indemnización
En un hito legal sin precedentes, las empresas químicas Chemours, DuPont de Nemours y Corteva han acordado pagar una compensación monumental de mil millones de dólares para resolver una demanda colectiva que las acusa de contaminar las aguas potables con sustancias perfluoroalquiladas y polifluoradas (PFAS), conocidas como tóxicos o compuestos "permanentes".
Este acuerdo, que aún está sujeto a la aprobación de un juez, marca un hito significativo en los casos de contaminación por PFAS y se produce en un momento en que la Justicia del país se enfoca en las grandes empresas involucradas en esta crisis medioambiental y de salud.
El impacto de la compensación récord La compensación acordada por Chemours, DuPont y Corteva es la más sustancial hasta la fecha en casos de contaminación por PFAS. Este hito legal destaca la creciente responsabilidad que enfrentan las empresas en relación con la contaminación ambiental.
La compensación masiva es una señal de que estas empresas han aceptado silenciosamente su responsabilidad en la crisis de los PFAS, evitando así un largo y costoso juicio sin admitir culpabilidad.
Tras el anuncio del acuerdo, las acciones de Chemours se dispararon un 24% en Wall Street, mientras que DuPont y Corteva experimentaron aumentos del 7.31% y 3.82%, respectivamente. Esto indica el impacto significativo que este acuerdo tiene en la percepción del mercado y en la valoración de estas empresas.
Responsabilidad ambiental y consecuencias La responsabilidad ambiental de DuPont y sus empresas asociadas no se limita solo a la contaminación de las aguas potables con PFAS.
Según el bufete de abogados Napoli Shkolnik, representante de los denunciantes en la demanda colectiva, estas empresas enfrentan una mayor responsabilidad por los "daños personales y cáncer" causados a personas, incluidos bomberos y militares, así como "daños a la propiedad" en hogares y a recursos municipales, como aeropuertos, instalaciones de bomberos e infraestructuras de tratamiento de aguas residuales.
Las sustancias PFAS han sido utilizadas durante décadas debido a sus propiedades antiadherentes e impermeabilizantes en una amplia gama de productos. Sin embargo, la exposición crónica a niveles bajos de estas sustancias ha sido asociada con efectos nocivos para la salud, como enfermedad tiroidea, daños en el hígado y varios tipos de cáncer. La compensación récord pagada por Chemours, DuPont y Corteva es un reconocimiento de los impactos negativos que estas sustancias han tenido en la salud de las personas y en el medio ambiente.
Repercusiones legales y futuros juicios El juez encargado del caso en Carolina del Sur, Richard Gergel, tiene pendientes otras 4 mil causas relacionadas con la contaminación por PFAS, las cuales se han centralizado en su tribunal. E
stos casos adicionales resaltan la magnitud del problema y la atención que se le está prestando a la responsabilidad de las empresas en relación con la contaminación por PFAS. Próximamente, el juez Gergel supervisará un juicio contra otras acusadas, incluyendo la empresa 3M, en relación con la misma crisis medioambiental y de salud.
En los últimos años, más de una decena de fiscales estatales de EE.UU. han demandado a empresas químicas fabricantes de PFAS, obteniendo cuantiosas compensaciones individuales.
Por ejemplo, Minesota logró un acuerdo de 850 millones de dólares con 3M en 2018. Estos precedentes legales establecen una clara señal de que las empresas químicas enfrentarán cada vez más demandas y responsabilidades por la contaminación causada por las sustancias PFAS.
A medida que se desarrollen más juicios y se obtengan compensaciones individuales significativas, las empresas químicas se enfrentarán a mayores presiones legales y a la necesidad de adoptar medidas más sólidas para prevenir la contaminación y proteger la salud pública.
