CONSUMIDOR: ¿Has sido discriminado? Mira lo que puedes hacer

La forma más común de discriminación en el consumo es cuando una persona quiere acceder a un producto o servicio ofrecido por un proveedor, pero obtiene a cambio una negativa, un rechazo o un maltrato basados en razones injustificadas.

Creemos que hay que tratar a las personas por igual y en CECNA promovemos la defensa de quienes son discriminados. En el mundo actual, la discriminación en el consumo se manifiesta de muchas maneras.

Por ejemplo, si quieres alquilar una propiedad y el propietario te lo niega porque eres de alguna determinada raza, género o preferencia sexual, esto es discriminación en el consumo. Otro ejemplo sería si te niegan la entrada a un restaurante porque no sirven a personas con sobrepeso.

En estos casos vemos que, aunque el consumidor tenga dinero para pagar el servicio o el producto que busca, se le niega el acceso por su aspecto físico o su raza.

Una situación que va en aumento

La discriminación al consumidor ya no se limita exclusivamente a las prácticas ilegales que realizan algunos establecimientos comerciales. De hecho, en algunos países existen iniciativas con las cuales se establecería una especie de récord o puntaje para cada consumidor.

Regímenes políticos como el que tiene actualmente China, está desarrollando un sistema social de puntos de crédito que le asignarían a cada ciudadano de ese país, la posibilidad de acceder o no a determinados productos, trabajos, escuelas o servicios, todo basado en los hábitos de consumo. Es decir, si pagas a tiempo tus facturas o tus impuestos, se te asignará una serie de puntos que te permitirá como consumidor, acceder a determinados servicios. En esencia eso es discriminación.

En el caso del Marketplace Amazon, si estás suscrito a la modalidad Prime, esta pudiera ser revocada si devuelves muchas veces productos, colocándote en una lista de clientes incómodos.

Teniendo en cuenta que la no discriminación es uno de los derechos fundamentales de los consumidores, el simple hecho de ser etiquetado como bueno o malo ya sería visto como una violación a este derecho.

¿Qué dice la legislación mexicana sobre la discriminación en el consumo?

El artículo 58 de la Ley Federal de Protección al Consumidor, prohíbe expresamente que cualquier proveedor de bienes, productos o servicios, condicione en modo alguno el acceso a estos.

Es decir, los proveedores comerciales no pueden hacer distinciones arbitrarias a la hora de fijar los precios, de permitir o negar la entrada a un establecimiento comercial o de suministrar el bien o servicio adquirido por el consumidor.

Tampoco pueden hacer publicidad discriminatoria ni adoptar prácticas de comercialización que impliquen una exclusión arbitraria por motivos de nacionalidad, sexo, condición social, creencias religiosas o características físicas.

Existen razones justificadas en las cuales los proveedores pueden impedir que algunos consumidores compren un producto o contraten un servicio. Por ejemplo, un restaurante puede impedir la entrada a una persona violenta que represente un peligro para los demás consumidores que se encuentren en el local.

Otro ejemplo sería si un consumidor quiera comprar algo, pero no puede pagarlo, o si rechaza el pago después de haber recibido los bienes o servicios, en ese caso no estaríamos en presencia de alguna discriminación.

La discriminación al consumidor es una burla para la sociedad

Los consumidores deben ser conscientes de sus derechos. La discriminación es una práctica muy extendida que se nutre de los prejuicios, puede perjudicar la imagen y la reputación de la persona porque sus acciones se consideran injustas.

Si alguna vez crees que eres víctima de este tipo de situaciones, no te quedes callado y denuncia la situación ante la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), a fin de que se apliquen medidas contra la discriminación.