Por presunta epidemia de salud mental: 41 Estados de EE.UU. demandan a Facebook

En un asalto sin precedentes a los titanes de las redes sociales, decenas de estados de Estados Unidos han alzado su voz contra Meta Platforms Inc., acusándola de un ataque directo a la salud mental de los jóvenes.

El impacto en la salud mental juvenil se ha convertido en una sombra que se cierne sobre las plataformas de Instagram y Facebook, diseñadas de tal manera que resultan adictivas para los menores, un grito de alarma que resuena en tribunales federales de California.

Un grito de angustia

La demanda presentada en California no es solo un acto judicial, es un grito de angustia de fiscales generales, una coalición bipartidista, proveniente de California, Florida, Kentucky, Massachusetts, Nebraska, Nueva Jersey, Tennessee y Vermont, que busca justicia para los jóvenes de América y acusan a Meta de dañar a los más vulnerables de nuestra sociedad.

La batalla se libra en el corazón de la tecnología y la conectividad social, ya que el argumento central se basa en la alegación de que Meta recopila datos de niños menores de 13 años sin el consentimiento de sus padres, lo que constituye una violación de la ley federal. Esto va más allá de la mera recopilación de datos; es un asalto a la confianza de los padres en el mundo digital.

El lado oscuro de la adicción

"Los niños y los adolescentes están sufriendo niveles récord de enfermedades mentales y las compañías de redes sociales son las culpables", así lo expresa Letitia James, fiscal general del estado de Nueva York, con una firmeza que resuena en todo el país. Meta se encuentra en el ojo del huracán, acusada de lucrarse a expensas del sufrimiento de los niños. ¿Cómo? Diseñando intencionalmente sus plataformas con características manipuladoras que enganchan a los niños y minan su autoestima.

La demanda no es fruto de la casualidad, sino del fruto de una investigación minuciosa que arroja luz sobre los oscuros secretos de la industria. Varios reportes de prensa, el primero de ellos del Wall Street Journal en otoño de 2021, se basaron en estudios internos de Meta.

Estos estudios arrojaron una verdad aterradora: la compañía conocía los efectos nocivos que Instagram podía causar en los adolescentes, especialmente en las niñas, en lo que respecta a su salud mental y su autoimagen.

Impacto en la autoestima

Un estudio interno realizado entre niñas adolescentes puso de manifiesto una realidad que nos estremece: el 13.5% cree que Instagram intensifica las ganas de suicidarse, mientras que el 17% sostiene que agrava los trastornos alimenticios. Esto no es solo un conflicto legal, es una batalla por la autoestima y el bienestar de la juventud.

Por este motivo, la demanda contra Meta Platforms Inc. plantea preguntas fundamentales sobre la responsabilidad de las grandes empresas tecnológicas en la salud mental de los jóvenes. A medida que el debate continúa y se desarrolla en los tribunales, queda por verse cómo este caso podría impactar en la regulación de las redes sociales y la protección de los jóvenes en línea.